Héroe sobreviviente:
Craig Northcutt

Hace doce años, Craig Northcutt se cayó de un cuatriciclo mientras circulaba a gran velocidad y se golpeó la cabeza contra el suelo. No llevaba casco. La lesión le provocó una hemorragia cerebral que le causó un accidente cerebrovascular isquémico y casi pierde la vida.

Inmediatamente después del accidente, Craig pudo hablar con su mejor amigo James, que estaba con él. Momentos más tarde, Craig comenzó a tener problemas para respirar y luego dejó de responder. James llamó al 911 y le realizó RCP hasta que llegaron los paramédicos. Craig fue trasladado en avión a un hospital, donde le practicaron una craneotomía de emergencia.

Durante los siguientes tres meses, Craig se recuperó de su lesión cerebral traumática y de su derrame cerebral estando internado en diferentes hospitales. Las lesiones afectaron gravemente su habla, su visión, sus capacidades cognitivas y su capacidad para caminar.

Después de tres meses de recuperación, Craig estaba listo para la terapia de rehabilitación hospitalaria. Con un casco protector, llegó al Centre for Neuro Skills de Dallas en silla de ruedas. Al principio, Craig se mostró hostil y se negó a participar en la terapia, sin entender por qué la necesitaba. Poco a poco, creó relaciones con el personal del centro, quienes lo ayudaron a darse cuenta de que la terapia lo ayudaría a recuperarse para poder regresar al trabajo que amaba.

Durante nueve meses, Craig se dedicó a una intensa neurorrehabilitación. Su fisioterapeuta le ayudó a fortalecer el cuerpo y los médicos le ayudaron a corregir la visión. Volvió a aprender a hablar con fluidez y recuperó plenamente sus capacidades cognitivas. Empezó a caminar con un bastón, que ya no necesita.

Menos de un año después de su accidente, Craig volvió a trabajar para su tribu nativa americana, la Nación Choctaw de Oklahoma, donde ayuda a los miembros de las naciones tribales a desarrollar sus habilidades profesionales y encontrar empleo. Está celebrando su aniversario laboral número 30.

Craig también visita escuelas secundarias de Oklahoma y Texas para instar a los conductores de cuatriciclos a usar casco y hablar sobre las lesiones cerebrales traumáticas y los derrames cerebrales. Ha distribuido más de 200 cascos a estudiantes de secundaria para promover la seguridad. También comparte su historia con supervivientes de derrames cerebrales a fin de ayudarles a encontrar la motivación para recuperarse.